Tras 17 años de espera, Paul McCartney regresó a nuestro país para brindar dos shows en el estadio de River Plate. Te invitamos a que revivamos juntos los mejores momentos de uno de los recitales más esperados del año.
Más de 45 mil personas (por fecha) pudieron disfrutar de un show, de casi 3 horas, repleto de clásicos inoxidables tanto de los Beatles como de Wings pasando por su extensa carrera como solista. Se pudo ver a un McCartney más que entero apelando a su simpatía como principal arma de persuasión.
El show recorrió todas las épocas musicales que el ex beatle atravesó en su carrera.
Los presentes deliraban cada vez que Paul hablaba en, un mas que aceptable, castellano. No faltaron los clásicos que hicieron emocionar a todos los beatlemaniacos presentes como “All my loving”, “Get back”, “Let it be”, “Yesterday” y tantos otros. La banda mostro una simetría perfecta acompañando de manera extraordinaria al músico de casi 70 años. Quizás los momentos más emotivos de ambos shows fueron las dedicatorias a sus ex compañeros ya fallecidos, John y George, entonando “Here Today” en memoria de Lennon y “Something”para Harrison.
También le dedicó unos palabras a su ex esposa y compañera, Linda, antes de la magnifica interpretación de “My Love”. Otro momento emocionante fue la impactante
“Live and Let Die” con fuegos artificiales iluminando la noche en el recinto de Nuñez. Gente de todas las edades disfruto, de diferentes maneras, un show único e irrepetible que solo un Beatle puede brindar. Con un sonido perfecto y una estética digna de un evento de estas características
McCartney dejo en claro su
vigencia y dejó una huella profunda en la vida de los seguidores que esperaron tantos años para volverlo a ver.
Por Germán Rodriguez