Luego de 3 años de espera, Black Rebel Motorcycle Club volvió a la Argentina para tocar dos fechas en Niceto Club con su último disco Beat The Devil's Tatoo en sus manos y una propuesta que no dejó sobrevivientes.
Fueron casí dos horas y media de ritual de la mano del trio que dejó a todo el público hipnotizado con una pared de sonido indescriptible de matices que nos llevan por varios estilos o géneros: desde el garage rock, psicodelia, shoegaze, rock espacial, y la lista sigue interminablemente.
En un show demoledor la banda recorrió todos sus discos (5 de estudio) desde la psicodelía de su disco B.R.MC, el Garage Rock de "Take Them On, On Your Own" volando cabezas con Six Barrel Shotgun o Stop, hubo descansos tanto para el público y la banda con temas acústicos del álbum "Howl" tal como Devil's Waiting (tocada y cantada con una fuertes dosis emotiva por Peter Hayes), Luego llegarón canciones de los últimos dos discos "Baby 81" y "Beat The Devil's Tatoo" con mucho Rock , distorsión, pogo con canciones como "Berlin" y "Conscience Killer"
Todo fue comandado por el bajista Robert Levon Been que es otra muestra de que un bajista puede ser un tremendo frontman, un tipo al que le fluye una actitud rockera increíble, capaz de impresionar a cualquiera, le sigue el guitarrista Peter Hayes, creador de todo un mundo repleto de melodías que hace innecesaria la presencia de un 2do guitarrista. Por último la nueva baterista Leah Shapiro (ex The Raveonettes) dejó a todos con la boca abierta por su potencia y técnica, nadie mejor para marcarles el camino a los dos monstruos que están adelante.
Y ya se fueron los BRMC, dejando en claro que el rock independiente pisa fuerte, y que ha fuerza de buena música y actitud se sigue haciéndose un lugar en la escena del rock mundial y cada día va sumando más gente a este ritual del que nadie se quiere ir.